sábado, 19 de abril de 2014

ESCOLLOS GRAMÁTICALES


Escollos gramaticales


Los escollos gramaticales se explican como la forma incorrecta de expresiones lingüísticas tanto habladas como escritas. Es un tema recurrente para redactores, escritores, locutores y en general todo aquel que haga del lenguaje su herramienta de trabajo.
El empleo correcto del idioma en nuestro país, es un asunto muy importante al que casi no se le ha prestado atención. Muchas personas adultas, que incluso ostentan grados académicos, padecen la falta del manejo escrito de la propia lengua. Esta circunstancia se debe a que de niños o de jóvenes, no tuvieron una instrucción adecuada en la materia. Sin embargo, ésta no debe ser una excusa ni una justificación para que nunca lleguen a superar esta debili­dad académica. Si existe un genuino deseo de mejorar la escritura, es preciso que ésta se practique, junto con la lectura, con decidida constancia y con voluntad inquebrantable. Sólo así será posible salvar con éxito los escollos de la escritura, con los que todos podemos tropezar.

Algunas de estas expresiones mal utilizadas son: el gerundio, el laísmo, el loísmo, el holismo y el leísmo.
Gerundio: En la lingüística, y en el contexto particular de la gramática, el gerundio es una conjugación del verbo que demuestra una acción; pero no está definida ni por el tiempo, el modo, el número ni la persona. (Desinencia o terminaciones: -ando para la primera conjugación (-ar); -iendo para las conjugaciones segunda y tercera (-er, -ir).
Laísmo: es el uso de los pronombres personales "la" y "las" en función de objeto indirecto para referentes del género femenino en lugar de las formas estándar "le". En ciertos dialectos del español el laísmo es un fenómeno extendido. La lengua castellana mantiene la antigua declinación latina y uso de los casos latinos en los pronombres personales y la evolución de la lengua castellana tiende a la eliminación total de los casos latinos.
Loísmo: es una peculiaridad de ciertos dialectos del español que consiste en la sustitución del pronombre personal "le" (que representa generalmente al objeto indirecto) por "lo" (que se reserva, en dialectos no loístas, para el objeto directo). Desde el punto de vista del español normativo la Real Academia Española condenó el loísmo en 1874 y lo reconoce como un vulgarismo, por lo que no es correcto el uso "loísta" en español normativo.

 La lengua castellana mantiene la antigua declinación latina y uso de los casos latinos en los pronombres personales y la evolución de la lengua castellana tiende a la eliminación total de los casos latinos, reflejo que tienen algunas personas en la tendencia a suprimir la diferencia de funciones entre el complemento directo y complemento indirecto por medio del género. El "loísmo" es un fenómeno paralelo al laísmo y al leísmo pero mucho menos habitual, puesto que las entidades a las que según la norma laísta/leísta refiere el pronombre "lo" raramente toman el papel semántico habitualmente asignado al objeto indirecto
Holismo: trata de presentarse directamente como un axioma para el nuevo planteamiento que se proponga resolver y a veces no es expuesto como una hipótesis. Este es su principal problema de validación, al ver si tiene las propiedades del método científico.
Leísmo: es la sustitución del pronombre personal lo / la por le en la posición de complemento directo y en los verbos que tradicionalmente rigen el caso acusativo.
Forma leísta
Al policía le golpearon a la salida.
Forma estándar
Al policía lo golpearon a la salida.

EJEMPLOS

A – HA / SINO SI.

SI NO: condiciona

Regla práctica: Para saber cuándo debes escribir SINO (junto) o SI NO (separado) intenta colocar inmediatamente después de estas partículas la conjunción QUE.
Si la frase lo admite, escribe SINO; en caso contrario escribe SI NO.
*El diputado no asistió, sino (que*) prefirió quedarse en su casa. [*el que lo puedes omitir]
*No iré en bus, sino (que) en avión
*El sino (destino) de mi vida es estudiar
*Si no quieres ir, no vayas.
*Si no estudias, reprobarás.

NO DEBE, BEDE.
Siguiendo la norma, deber de + infinitivo expresa ‘posibilidad, suposición, conjetura o creencia’, mientras que deber + infinitivo significa ‘obligación’:
 Yo pienso que detrás de todo esto hay una gran operación financiera en la que debe de haber personas de mucho peso. (Manifiesta una suposición).
Para alcanzar un acuerdo, ambas partes deben mostrar cierta flexibilidad. (Expresa una obligación).
Debería haber una ventana al otro lado. (Expresa una obligación).
Debe de haber una ventana al otro lado. (Manifiesta una suposición).
Es decir, y como regla nemónica, cuando nos referimos a obligación de, necesidad de, conveniencia de, etc., debemos usar deber, ya que en sí misma la palabra implica la preposición de.
No obstante, a menudo se confunden ambas perífrasis verbales, probablemente por su semejanza formal:
(INCORRECTO) La diversidad que nos enriquece debe de unirnos en lugar de separarnos.
(CORRECTO) La diversidad que nos enriquece debe unirnos en lugar de separarnos.
 (CORRECTO) Deben de ser las tres, porque la gente se va a comer.
(INCORRECTO) Deben ser las tres, porque la gente se va a comer.
Según afirma el Diccionario panhispánico de dudas, la norma culta admite también el uso sin preposición para expresar conjetura o suposición:
(CORRECTO) Marianita, su hija, debe tener unos veinte años.
El verbo deber, según el Diccionario de la lengua española de la Real Academia Española, tiene los siguientes significados:
    1.  Estar obligado a algo por la ley divina, natural o positiva. U. t. c. pral. Deberse a la patria.
    2.  Tener obligación de corresponder a alguien en lo moral.
    3.  Cumplir obligaciones nacidas de respeto, gratitud u otros motivos.
    4.  Adeudar (‖ tener una deuda material con alguien). Pedro debe mil pesetas a Juan.
    5.  Tener por causa, ser consecuencia de. U. t. c. pral. La escasez de los pastos se debe a la sequía.
La secuencia deber de únicamente debe usarse en el caso siguiente:
    6.  U. como auxiliar en las perífrasis, en las que añade una nota de inseguridad o probabilidad al verbo principal. Debe DE hacer frío.
Otra causa de esa confusión podría ser —es solo una conjetura— que el hablante no culto no entiende el verdadero significado de la preposición de y simplemente la emplea como comodín; es decir, la añade o la suprime a medida que va hablando y construyendo las frases y oraciones según le parece que «queda mejor» (como ocurre con los dequeísmos y queísmos).
Cuando hablemos de posibilidad, de probabilidad o de creencia o seguridad parcial, debemos usar deber de. No obstante, con este sentido, la lengua culta admite también el uso sin preposición, por lo que si se duda o se ha de hablar rápido y sin pensar, lo más seguro es emplear siempre deber, sin preposición; claro que es aconsejable usar la forma precisa en cada caso.

Ejemplos:
Si queremos expresar la necesidad de firmar un acuerdo, deberíamos decir, en su caso, El acuerdo debería ser firmado [~ tendría que ser firmado]... en lugar de *El acuerdo debería de ser firmado...
Si, por el contrario, lo que queremos expresar es duda sobre si el acuerdo ha sido firmado o no, podríamos expresarlo como No lo sabemos con seguridad, pero el acuerdo ha debido de firmarse [~ probablemente se ha firmado], ya que parece que hay ambiente cordial...
SU / ASI MISMO; ASIMISMO
'Debemos evitar el uso anglicado y galicado del posesivo en vez del determinante.
 No se debe escribir:
 Le costó la amputación de su pierna.
'; Eso es lo que dice el Manual de Español Urgente de la Agencia EFE sobre el uso indebido del posesivo (su o sus) por influencia del inglés o del francés, cuando lo correcto en español sería utilizar un determinante: el, la, los las, un, una...;; Ese uso ajeno al buen español es muy corriente en las noticias sobre deportes ya que en esa actividad son frecuentes los accidentes y las lesiones.
 No es raro oír que tal o cual jugador se ha lesionado su rodilla derecha; que tiene una fractura en su tobillo izquierdo o que ha recibido un fuerte pelotazo en su ojo derecho.
 En ocasiones no se trata de accidentes ni de lesiones, sino de faltas punibles según el reglamento: 'Tocó el balón con su mano derecha', o de jugadas que deben ser destacadas:
 'Chutó con su pierna izquierda y logró el gol del empate’.
 Lo correcto habría sido decir:
 'Se ha lesionado la rodilla derecha'; 'tiene una fractura en el tobillo izquierdo'; 'ha recibido un fuerte pelotazo en el ojo derecho'; 'tocó el balón con la mano derecha'; 'Chutó con la pierna izquierda y logró el gol del empate', etc.;
 Tampoco es correcta ni propia del español la tendencia, también en las crónicas deportivas, a eliminar el determinante, en frases como 'fulano se desplaza por banda derecha', 'mengano se adelanta y dispara con pierna izquierda' o 'el balón se pierde por línea de fondo'. Fernando Lázaro Carreter advertía al respecto en su conferencia 'El español en el lenguaje deportivo' incluida en el libro de la Agencia EFE 'El idioma español en el deporte'
LE, LAS, LE, LOS.
La sustitución del pronombre personal lo/la por le en la posición de complemento directo y en los verbos que tradicionalmente rigen el caso acusativo en español:
-          Forma leísta
-          Al policía le golpearon a la salida.
-          Forma estándar
-          Al policía lo golpearon a la salida.

El uso de los pronombres personales "la" y "las" en función de objeto indirecto en lugar de las formas estándar "le" y "les".
Cuando un "laísta" dice:
-          La pegué; uno que no lo es entiende: que "la cosa" referida fue pegada (con un adhesivo) y no "golpeada" que es lo que el "laísta" quería decir.
El "le" indirecto es ambiguo; para quitar la ambigüedad utilizamos un segundo pronombre con preposición:
-          Dale un beso, a ella (a él).

La Real Academia de la Lengua Española condenó el laísmo en 1796.
Esto se traduce en el uso de "lo" y "los" en función de complemento (objeto) indirecto; cuando el referente es del género masculino en vez de "le" y "les".
Se produce por paralelismo con el laísmo: "la" y "las" para el género femenino; "lo" y "los" para el género masculino.
Un ejemplo sería:
-           "A lo que dijiste "lo" pude haber dado más relevancia, pero no lo hice".

 

Estimulación Temprana


Estimulación temprana
 


¿Cuándo surge la estimulación temprana?

La estimulación temprana surge a mediados del siglo pasado con la intención de atender a niños y/o niñas con alguna deficiencia, a aquellos cuyas madres habían tenido problemas o dificultades durante el embarazo y/o parto, etc. Se empezaron a ver con gran asombro los logros que se tenían y los avances que lograban los pequeños, así  que se pensó en la idea de comenzar a implementarlo en niños y/o niñas  sanos para iniciar, lo antes posible, su estimulación sin perder las grandes posibilidades que el niño y/o niña ya posee desde que nace.

No se pretende potenciar niños precoces, ni adelantarlos en su desarrollo o evolución natural sino ofrecerles una amplia gama de experiencias que sirvan similar a la base para futuros aprendizajes. Según Jean Piaget, “todo aprendizaje se basa en experiencias previas”, entonces, si el niño nace sin experiencia, mediante la estimulación se le proporcionarán situaciones que le inviten al aprendizaje. La idea es abrir canales sensoriales para que el niño adquiera mayor información del mundo que le rodea. Es sumamente importante conocer al niño y hacerle una valoración a través de la observación para saber por dónde empezar a ofrecerle las experiencias poniendo atención en sus áreas de desarrollo o evolución y a la misma duración necesaria ir estimulando la atención y la memoria.

Concepto

La estimulación temprana, estimulación precoz o atención temprana es un grupo de técnicas para el desarrollo de las capacidades y habilidades de los niños en la primera infancia. Es el grupo de técnicas educativas especiales empleadas en niños entre el nacimiento y los seis años de vida, con el objetivo de desarrollar al máximo sus capacidades cognitivas, físicas y psíquicas, permite también, corregir trastornos reales o potenciales en su desarrollo, o para estimular capacidades compensadoras. Las intervenciones contemplan al niño globalmente y los programas se desarrollan teniendo en cuenta tanto al individuo como a la familia y el entorno social que lo rodea. (Orlando Terré, 2002).
También le llamamos Estimulación Temprana a toda aquella actividad de contacto o juego con un bebe o niño que propicie, fortalezca y desarrolle adecuada y oportunamente sus potenciales humanos.
Tiene lugar mediante la repetición útil de diferentes eventos sensoriales que aumentan, por una parte, el control emocional, proporcionando al niño una sensación de seguridad y goce; y por la otra, amplían la habilidad mental, que le facilita el aprendizaje, ya que desarrolla destrezas para estimularse a sí mismo a través del juego libre y del ejercicio de la curiosidad, la exploración y la imaginación.
Cuando a un bebé se le proporcionan medios más ricos y vastos para desarrollarse, florece en él un interés y una capacidad sorprendente  para aprender. La estimulación se concibe como un acercamiento directo, simple y satisfactorio, para gozar, comprender y conocer al bebe, ampliando las alegrías de la paternidad y ensanchando su potencial del aprendizaje.
La verdadera estimulación temprana se realiza al bebé de recién nacido a los 3 meses de vida que es el periodo de tiempo en el que hay mayor plasticidad cerebral. Los primeros seis años de vida se caracterizan por un alto grado de plasticidad neuronal o plasticidad neural, que permite la adquisición de funciones básicas como el control postural, la marcha o el lenguaje. La consecución progresiva de hitos en este desarrollo va permitiendo la aparición y mejora de nuevas habilidades (por ejemplo, es necesario que el niño aprenda a sujetar la cabeza, controlando la musculatura del cuello, para que pueda dirigir la vista, lo que refuerza la motivación para la marcha o el contacto visual como elemento socializador…).
Este desarrollo surge de la interacción entre los genes y el ambiente. Los primeros son inmodificables, y establecen la base de capacidades propias de cada individuo. Los factores ambientales, sobre los que intervienen los programas de estimulación precoz, modulan e incluso inhiben o estimulan, la expresión de diversas características genéticas.
Dentro de los factores ambientales se incluyen los puramente biológicos (estado de salud, nutrición…) y otros de índole psicológica, social y cultural: sus vínculos afectivos iniciales, el nivel de atención que recibe, el grado de interacción del ambiente con el niño (personas que lo rodean, objetos, luz, sonidos…). Estos factores son fundamentales en la maduración de conductas de adaptación al entorno, de la disposición al aprendizaje, del establecimiento de diferentes estrategias de comunicación o del desarrollo emocional.


¿POR QUE RECIBIR ESTIMULACION TEMPRANA?

Durante esta etapa se perfecciona la actividad de todos los órganos de los sentidos, en especial, los relacionados con la percepción visual y auditiva del niño, esto le permitirá reconocer y diferenciar colores, formas y sonidos. (Poner ejemplo).  Por otro lado, lo procesos psíquicos y las actividades que se forman en el niño durante esta etapa constituyen habilidades que resultarán imprescindibles en su vida posterior. La etapa de 0-3 años de vida del niño establece particularidades en el desarrollo: Se caracteriza por su ritmo acelerado del desarrollo del organismo. Interrelación entre el estado de salud, el desarrollo físico y psiconervioso del niño. Alto grado de orientación con el medio. Desarrollo de estados emocionales. Papel guía del adulto en el proceso del desarrollo.
 La estimulación temprana busca estimular al niño de manera oportuna, el objetivo no es desarrollar niños precoces, ni adelantarlos en su desarrollo natural, sino ofrecerle una gama de experiencias que le permitirán formar las bases para la adquisición de futuros aprendizajes.

OBJETIVOS DE LA ESTIMULACION

El principal objetivo consiste en convertir la estimulación en una rutina agradable que vaya estrechando cada vez más la relación madre y/o padre-hijo(a), aumentando la calidad de las experiencias vividas y la adquisición de importantes herramientas de desarrollo infantil.

¿QUÉ ÁREAS COMPRENDE LA ESTIMULACIÓN TEMPRANA?

Para favorecer el óptimo desarrollo del niño, las actividades de estimulación se enfocan en cuatro áreas: área cognitiva, motriz, lenguaje y socioemocional. El área cognitiva: Le permitirá al niño comprender, relacionar, adaptarse a nuevas situaciones, haciendo uso del pensamiento y la interacción directa con los objetos y el mundo que lo rodea. Para desarrollar esta área el niño necesita de experiencias, así el niño podrá desarrollar sus niveles de pensamiento, su capacidad de razonar, poner atención, seguir instrucciones y reaccionar de forma rápida ante diversas situaciones.
a.      Área cognitiva:

El bebé desde que nace, no cesa de descubrir y conocer el mundo que le rodea. Despertar los sentidos del bebé (olfato, oído, vista y tacto) para que pueda percibir y relacionar estímulos entre sí, eso ya es  un acto cognitivo y perceptivo que estimula sus capacidades intelectuales.
 Le permitirá al niño comprender, relacionar, adaptarse a nuevas situaciones, haciendo uso del pensamiento y la interacción directa con los objetos y el mundo que lo rodea. Para desarrollar esta área el niño necesita de experiencias, así el niño podrá desarrollar sus niveles de pensamiento, su capacidad de razonar, poner atención, seguir instrucciones y reaccionar de forma rápida ante diversas situaciones. Poner ejemplo.                                
También debemos evitar abrumarle con juegos, ejercicios y objetos. Es mucho más positivo mantener un ritmo sosegado y sereno.

b.      Área Motriz:

Esta área está relacionada con la habilidad para moverse y desplazarse, permitiendo al niño tener contacto con el mundo. También comprende la coordinación entre lo que se ve y lo que se toca, lo que lo hace capaz de tomar los objetos con los dedos, pintar, dibujar, hacer nudos, etc. Para desarrollar esta área es necesario dejar al niño tocar, manipular e incluso llevarse a la boca lo que ve, permitir que explore pero sin dejar de establecer límites frente a posibles riesgos. Poner ejemplo.
Para describir el desarrollo del movimiento se divide en motor grueso y motor fino. El área motora gruesa que tiene que ver con los cambios de posición del cuerpo y la capacidad de mantener el equilibrio. La motora fina se relaciona con los movimientos finos coordinados entre ojos y manos.

Ø  Desarrollo Motor Grueso

Primero debe sostener la cabeza, después sentarse sin apoyo, más tarde equilibrarse en sus cuatro extremidades al gatear y por último, alrededor del año de edad, pararse y caminar. La capacidad de caminar en posición erecta es una respuesta a una serie de conductas sensoriales y motoras dirigidas a vencer la fuerza de gravedad.
Trabajar contra la fuerza de gravedad requiere de esfuerzo, por lo que el niño fácilmente se fatiga y se niega.
Ø  Desarrollo Motor Fino

El desarrollo motor fino comienza en los primeros meses cuando se descubre sus manos el bebe y poco a poco a través de experimentar y trabajar con ellas, podrá empezar a darle un mayor manejo.
Al dejarle juguetes a su alcance el bebe tratara de dirigirse a ellos y agarrarlos. Una vez logra coordinar la vista con la mano, empezara a trabajar el agarre, el cual hará inicialmente con toda la palma de la mano.
Es por esto que inicialmente necesita objetos grandes. Poco a poco le iremos ofreciendo objetos para que él tome y tenga que usar sus dos manos, y cada vez vaya independizando más sus deditos.
 
                    Enséñele a dar palmadas.
                    Sacar objetos de una caja pequeña.
                    Ponerle la tapa a un recipiente.
                    Usar el dedo índice; tocar piano; tocar tambor.

Al año la motricidad fina se va perfeccionando, agarra objetos con facilidad y habilidad de pinza, intenta garabatear trazos finos y cortos en una hoja, pasa paginas gruesas, tira y levanta objetos, lo que significa que su coordinación perceptivo motora se aproxima cada vez más a la del adulto, pues los movimientos de aferrar, apretar, soltar y lanzar objetos se afinan.
Cada vez más se desarrolla la habilidad de insertar. También intentara dirigir la cuchara a su boca, el cepillo a su pelo y el teléfono a su oído.

c.       Área de lenguaje:

 Está referida a las habilidades que le permitirán al niño comunicarse con su entorno y abarca tres aspectos: La capacidad comprensiva, expresiva y gestual. La capacidad comprensiva se desarrolla desde el nacimiento ya que el niño podrá entender ciertas palabras mucho antes de que pueda  pronunciar un vocablo con sentido; por esta razón es importante hablarle constantemente, de manera articulada relacionándolo con cada actividad que realice o para designar un objeto que manipule, de esta manera el niño reconocerá los sonidos o palabras que escuche asociándolos y dándoles un significado para luego imitarlos. Faltan  los 2 últimos aspectos. Poner ejemplo.

d.      Área Socio-emocional:

 Esta área incluye las experiencias afectivas y la socialización del niño, que le permitirá  ser querido y seguro, capaz de relacionarse con otros de acuerdo a normas comunes. Para el adecuado desarrollo de esta área es primordial la participación de los padres o cuidadores como primeros generadores de vínculos afectivos, es importante brindarles seguridad, cuidado, atención y amor, además de servir de referencia o ejemplo pues aprenderán cómo comportarse frente a otros, cómo relacionarse, en conclusión, cómo ser persona en una sociedad determinada. Los valores de la familia, el afecto y las reglas de la sociedad le permitirán al niño, poco a poco, dominar su propia conducta, expresar sus sentimientos y ser una persona independiente y autónoma. Poner ejemplo.

Desde que el niño nace necesita afecto y este puede ser expresado de diversas formas:

        Háblele: siempre al niño con cariño, mirándolo a la cara, llamándole por su nombre. No importa que el niño no entienda lo que se dice, lo que importa es que él está establecimiento una comunicación a la cual pronto va a responder con sonrisas y gorjeos.
        Acarícielo: cuando le hable, le cambie el pañal...
        Acójalo: siempre que busque atención. En este aspecto es importante tener en cuenta la forma de cómo el niño busca aquella. Hay algunos que para conseguirla patalean, lloran, pegan etc. Hágale saber al niño, suave y a la vez firmemente que lo atenderá cuando se lo pida sin llorar sin golpear, cumpla esto.
        Celebre: todo comportamiento que considere un éxito o progreso.
        Mantenga una actitud de simpatía o empatía con el niño: cuando el bebe se sienta alegre exprésele su entusiasmo; así mismo en sus contratiempos, cuando se sienta triste o enfadado, hágale comprender que usted entiende esa situación.
        Proporcióneles experiencias: ofrézcales situaciones a los niños bajo las cuales pueda satisfacer sus intereses. Permita que el niño se esfuerce para agarrar el objeto.
        Si le ha prometido algo al niño, cúmplalo, así él aprenderá a confiar en usted.
        Es importante adaptarse a las condiciones del niño, incorporándose en su juego, sentándose en un banco o en el suelo, con el objetivo de estar a la altura de él.
        Evite comentarios frente al niño que lo pueda lastimar.

Influencia de la tecnología en la estimulación temprana

Junto con los juegos, canciones y pequeños ejercicios para estimular al bebé, actualmente la era digital está influyendo enormemente en este proceso. La Estimulación temprana 2.0 o bebés tecnológicos, cuyos padres usan los avances de la tecnología para la enseñanza de sus hijos, ha presentado un auge impresionante pues ya en la vida diaria se ha fomentado constantemente.
Los bebés de la era digital son “nativos digitales”, a causa de la capacidad natural que tienen para interactuar con la tecnología. Muchos hemos visto que los pequeños, en forma intuitiva, saben ocupar dispositivos tecnológicos más rápido que cualquier adulto. Lo mismo pasa con el aprendizaje con estas herramientas. Si por un lado a los adultos les es más difícil o lento este proceso, en los niños se da en forma fluida, casi como si tuvieran incorporado este lenguaje.
Las empresas y desarrolladores han creado dispositivos especialmente para los bebés. La empresa Rullingnet creó una Tablet dirigida a los niños menores de tres años, Vinci Tab. Este producto tiene ciertas características específicas para ellos, con el objetivo de convertirse en una propuesta para los padres que siguen las tendencias tecnológicas del mercado y que ven en este tipo de productos, una herramienta didáctica para el desarrollo emocional y social de los más pequeños.
Actualmente, existen gadgets, monitores, cámaras, y dispositivos médicos de todo tipo y con tecnología de punta orientados a los bebés, para quienes han desarrollado equipos capaces de llamar su atención y que también facilitan la vida a los padres. Una de las aplicaciones más novedosas del mercado es PHPRO, un portal web-Mobile especializado en la estimulación precoz y la atención temprana en niños de 0 a 6 años. Sin duda un completo manual de instrucciones para padres que quieran potenciar las capacidades de su hijo/a. El padre o la madre registra a su hijo/a y rellena un formulario con el que programa detectará la "edad de desarrollo" del menor para, a partir de ahí, empezar a proponerle ejercicios, juegos, aplicaciones, canciones, cuentos infantiles... De este modo, el pequeño mejorará exponencialmente sus capacidades en áreas básicas como la cognitiva, el lenguaje, la motricidad, la autoayuda o la socialización.
Además, cuenta con una particular "Escuela de Padres", un blog con consejos, recursos y noticias sobre puericultura, higiene, nutrición, seguridad, neurociencia, aprendizaje cerebro-compatible, etc. donde tanto padres como profesionales del campo de la educación y la salud pueden acceder para su consulta.

¿Qué implicaciones tiene generalizar la estrategia de estimulación para todos los niños?

Considero que generalizar las estrategias de estimulación para todos los niños es un error ya que ellos poseen diferentes etapas de desarrollo, diferente personalidad y diferente modo de aprendizaje y si no se los estimula adecuadamente se les dificultara y no disfrutaran de un pleno desarrollo, además es más fácil si los niños están en un mundo de sus mismas dimensiones estarán más cómodos, aprenderán rápido.
Desde su nacimiento hasta la edad escolar entre los siete y los ocho años, se debe brindar una estimulación adecuada. Los primeros años de vida constituyen una etapa de la existencia, donde se van a configurar las habilidades perceptivas, motrices, cognitivas, lingüísticas y socio-emocional.
La necesidad de proporcionar una estimulación propicia en el momento oportuno, condujo inexorablemente a la consideración de impartir esta estimulación desde los momentos más tempranos de la vida, surgiendo así el concepto de estimulación temprana del desarrollo.
En la estimulación en el desarrollo de 0 a 3 años, se plantean las características para un óptimo desempeño del ser en el aprendizaje y la maduración, sensorial, motrices, intelectuales, cognitivo, emocional y kinestésico del menor, reflejando la dinámica del desarrollo del infante y responde a los requisitos que permiten a los pedagogos, no sólo analizar y comparar sus exclusivos periodos de su progreso de movimientos activos, sino también compararlos con otros procesos.

La conducta de un niño estimulado a un niño que no ha sido estimulado

Los niños estimulados son aquellos que mantienen viva su curiosidad por todas las cosas del mundo. Su curiosidad se manifiesta de varias maneras:

·         los bebés, durmiendo cada vez menos de día, buscando con su mirada movimientos, colores, formas; descubriendo sonidos, olores.
·         Metiéndose en la boca todo lo que encuentre a su alrededor, es su manera de conocer el mundo, de incorporarlo.
·         Cuando empieza a andar sólo, investiga todo lo que esté a su alcance, y aquello que no está a su alcance, se lo procura (trepándose, pidiendo a los gritos que se lo acerquen).
·         Con la adquisición del lenguaje, tiene en sus manos una herramienta que le da infinitas posibilidades para demostrar su insaciable curiosidad: “¿y por qué? …Pero ¿por qué? ¿Cómo? ¿Qué es? ¿Para qué sirve? ¿Quién lo hizo? ¿De dónde salió? “.
·         Sus preguntas apuntan tanto a las cosas triviales (objetos, aparatos, materiales) que ven por ahí, como a las cuestiones metafísicas (Dios, el origen del universo, la existencia de las cosas: “¿mamá existen las hadas?").

Lo natural en el niño es querer investigar y conocer, explorar y preguntar. Cuando un niño no muestra el deseo de saber, algo lo está inhibiendo. Quizás sienta que su sed de aventura puede atemorizar a sus padres o que sus preguntas no serán bien recibidas.
En la medida en que tiene libertad -con los límites de cuidado apropiados para la ocasión: “puedes subirte a la silla, pero te enseñaré cómo debes bajarte para que no te lastimes”- para ir en busca de sus intereses y obtiene las respuestas convincentes a sus preguntas, el niño mantendrá viva sus ansias de descubrimiento.
Por lo tanto, lo que es antinatural en un niño es no sentirse estimulado. En estos casos habremos de preguntarnos qué puede estar adormeciendo su curiosidad: ¿Será que no le hablamos lo suficiente?, ¿será que no estamos aún preparados para aceptar la inevitable incomodidad que significa un niño curioso: activo, movedizo, preguntón? ¿Será que tememos no saber cómo ponerle los límites?
Estimular a los niños, entonces, es no descuidar su apetito de conocimiento. El resto, lo hacen ellos.

Conclusión

“En la información expresada nos da a entender que la estimulación temprana es toda actividad relacionada con el juego, esto con el fin de que propicie fortalezas y obtengan un desarrollo adecuado, la estimulación se conoce como un acercamiento directo para gozar, comprender y conocer a tu bebe, y así ampliándole alegrías y su potencial de aprendizaje”

Pensamos que por medio de la estimulación temprana se puede lograr muchas cosas positivas con el niño porque es la etapa en la que tanto docentes y padres o futuros padres que llegaremos a ser teniendo el privilegio de compartir con ellos por medio del juego, de rondas, bailes, ejercicios, entre otros. Todas estas cosas hacen que tengan un mejor aprendizaje y desarrollen más habilidades en las áreas cognitiva, comunicativa, motriz, y socio-emocional. Por esta razón debemos dedicarles tiempo, también dándoles un buen ejemplo, prestarles atención y así su desarrollo será el adecuado.

La estimulación es algo muy bonito puesto que lo podemos hacer desde el momento en el que está en el vientre porque debemos recordar que el bebe siente todo lo que la mama siente, si lo consiente, si le habla, si le juega, si lo ama.

Desde el momento en el que el niño nace también se puede trabajar, al bañarlo, aplicarle crema, consentirle la cabeza, colocarle el efecto Mozart etc. a medida que va creciendo se pueden utilizar varios métodos de estimulación dependiendo de su edad; por ejemplo:

·         Jugar con pelotas.
·         Al momento de bañarlos.
·         Subir y bajar piernas y brazos.
·         Ponerles móviles, juguetes de colores con diferentes formas y sonidos (puesto que esto perfecciona la actividad de todos los órganos y los sentidos en especial los relacionado con lo visual y auditivo de un niño).
·         Encajar.
·         Bailar.
·         Saltar.
·         Pintar.
·         Ensuciarse la ropa.
·         Comer solos.
·         Escuchar rondas infantiles.
·         Jugar con niños de su misma edad.
·         Tocar instrumentos musicales.

Poner ejemplo de cada  situación de bebe.

Es fundamental que todos los padres tomen consciencia y estimulen a sus hijos, puesto que es importante para que ellos en un futuro tengan un mejor aprendizaje. Como padres o futuros padres debemos responder a las preguntas de nuestros hijos con la verdad, juguemos, exploremos, contemos les cuentos, inventemos historias, para que ellos puedan obtener un mejor desarrollo.


Nota:
                                          Recuerde  que la clave para una buena estimulacion de un bebe o niño es hacer todas las situaciones de aprendizajes divertidas.
 
                     recuerde

 

ndizajes divertidas.
 



 

Asertividad


Asertividad

 

Como estrategia y estilo de comunicación, la asertividad se diferencia y se sitúa en un punto intermedio entre otras dos conductas polares: la agresividad y la pasividad (o no asertividad). Suele definirse como un comportamiento comunicacional en el cual la persona no agrede ni se somete a la voluntad de otras personas, sino que manifiesta sus convicciones y defiende sus derechos. Cabe mencionar que la asertividad es una conducta de las personas, un comportamiento. Es también una forma de expresión consciente, congruente, clara, directa y equilibrada, cuya finalidad es comunicar nuestras ideas y sentimientos o defender nuestros legítimos derechos sin la intención de herir o perjudicar, actuando desde un estado interior de autoconfianza, en lugar de la emocionalidad limitante típica de la ansiedad, la culpa o la rabia.


La palabra asertivo, de aserto, proviene del latín “assertus” y quiere decir 'afirmación de la certeza de una cosa'; de ahí puede deducirse que una persona asertiva es aquella que afirma con certeza. La asertividad es un modelo de relación interpersonal que consiste en conocer los propios derechos y defenderlos, respetando a los demás; tiene como premisa fundamental que toda persona posee derechos básicos o derechos asertivos.

¿Qué es la asertividad?                   


Hay quien considera que asertividad y habilidades sociales son términos sinónimos. Sin embargo, vamos a considerar que la asertividad es solo una parte de las habilidades sociales, aquella que reúne las conductas y pensamientos que nos permiten defender los derechos de cada uno sin agredir ni ser agredido.

La asertividad no es simplemente saber decir sí o no, muchas son las definiciones de esta "palabra", se puede considerar parte de las habilidades sociales, que permite el defender nuestros derechos sin agredir y sin ser agredidos, es en síntesis, el saber cuándo, cómo, dónde y porque responder afirmativa o negativamente a una determinadas situaciones y peticiones, dicha respuesta depende de muchos factores tanto sociales como personales.

A. Rodríguez (2001, 7) "La asertividad se basa en el respeto y por tanto comporta la libertad para expresarnos respetando a los demás y asumiendo la responsabilidad de nuestros actos".

Según L. Sánchez (2000, 2) "Expresión directa de los propios sentimientos, deseos, derechos legítimos y opiniones sin amenazar o castigar a los demás y sin violar los derechos de esas personas".

S. Robbins (2001, citado en Vanegas, 2003, 1) señala que "La asertividad hace que los estímulos que nos llegan sean los que exactamente nos fueron enviados; y hace que enviemos aquellos mensajes que en realidad queremos mandar y que esencializan nuestro respeto y el de los demás"

Según C. Sánchez (2003, 1) "La asertividad es un tipo de habilidad social que se posee en mayor o menor medida. Además, una misma persona puede exhibir una respuesta más o menos asertiva según la situación que afronte y el momento en que ésta se produzca".

Conducta asertiva:

Según Hernández (2003, 6) "Una conducta asertiva facilita un flujo adecuado de información en los grupos de trabajo y potencia la creación de más de una solución a los posibles problemas laborales que vayan surgiendo en el día a día".

La conducta asertiva es una capacidad de decir sin miedo lo que se siente teniendo en cuenta cómo hacerlo y porque, analizando la situación y llevando a cabo la mejor reacción ante el problema la cual dará satisfacción tanto al individuo, como a los que participan en el suceso.

La conducta asertiva es una forma de expresar nuestros derechos antes los demás:

  • El derecho a expresar nuestras ideas y emociones
  • El derecho a usar nuestro tiempo, cuerpo y dinero como queramos
  • El derecho a decidir cuándo si podemos o no ayudar a alguien
  • El derecho a preguntar y pedir ayuda cuando lo consideremos necesario
  • Derecho a cambiar de ideas, pensamientos y formas de actuar
  • Derecho a dejar de sentirnos inferiores y comenzar a lograr el éxito

Estos son algunos de los derechos que debemos mostrar a nuestros semejantes al comportarnos asertivamente, no olvidando ante todo el derecho a elegir nuestros propios caminos.

Morera y Franco (2004, 1) son de opinión que "La asertividad es, actualmente, una "técnica" comunicativa que nos permite, a partir del receptor hacia nosotros mismos, incidir en la modificación de la conducta de los demás"

La conducta asertiva nos ayuda también a tener la capacidad de pedir o más bien negociar de forma correcta con los que nos rodean, negociación basada en lo que deseamos transmitir de forma correcta y respetuosa sin necesidad de ser tímido o agresivo a la hora de hablar.

Es entonces una técnica para comunicar y a su vez modificar la conducta y manera de pensar de otros a través de la negociación de forma asertiva. Por tanto la persona que aborda una situación de forma asertiva tiene más posibilidades de lograr una solución satisfactoria, no solo para ella, sino para los que intervienen.

Con la vejez viene la sabiduría, dicta un viejo adagio, esto es muy cierto puesto que con la experiencia social, se adquieren los conocimientos necesarios para formarnos como individuos con carácter y con una personalidad asertiva ante la vida, no se puede aprender todo en un día, por lo cual para llegar a ser una persona completamente asertiva en todo sentido se debe de ir gradualmente y día con día inculcando los pensamientos e ideas que harán de nosotros mismo alguien mejor y con más confianza con el paso del tiempo.

Además las personas tienen que reconocer también cuáles son sus responsabilidades en esa situación y qué consecuencias resultan de la expresión de sus sentimientos. La conducta asertiva no tiene siempre como resultado la ausencia de conflicto entre las dos partes; pero su objetivo es la potenciación de las consecuencias favorables y la minimización de las desfavorables.

Causas de la falta de asertividad:

La asertividad evoluciona, su raíz es la interacción y la experiencia a través de formación social de cada individuo, que debilitan o refuerzan tanto su confianza como su autoestima a lo largo de su existencia.

Desde la infancia definimos los rasgos que más adelante nos distinguirán de otros individuos, nuestro carácter, personalidad, ideales, creencias, miedos, defectos, todo esta mezcla de características están entrelazadas formando lo que se conoce como un ser humano, cada pensamiento de cualquier persona tiene un fundamento y se basa en todas estas características, la idea de ser o no ser capaz de algo también está fundamentado en ellas, por lo cual tanto la autoestima, la confianza y por ende la asertividad dependen de lo mismo.

La falta de asertividad por tanto es parte de la decadencia o debilidad de las características básicas del carácter, pero también la falta de un ideal o meta, generan pérdida de autoestima y asertividad.

Si no tenemos bases como un ideal o una meta nuestro carácter es débil, pues estos alicientes abonan la confianza en nosotros para lograr los objetivos, o la para cumplir con nuestra ideología, generando una conducta asertiva respecto a nuestros propósitos; significa en si decir de frente y sin temor en que se cree y hacia donde se desea ir, sin que nadie más interfiera, esto no es más que demostrar nuestros derechos como seres pensantes a través de la conducta asertiva.

Muchos son los factores que afectan la falta de asertividad, pero los más importantes son:

  • Falta de carácter.
  • No tener metas ni objetivos.
  • Falta de confianza en nuestras habilidades.
  • Depender siempre de otros.
  • No tener fuerza para expresar nuestros derechos.
  • No aceptar que nos podemos equivocar.
  • Falta de creencias e ideologías.
  • Poca astucia para afrontar los retos.
  • Ajustar nuestro carácter al de los demás, solo para ser aceptados.



Recuerde: Ser asertivo no significa querer llevar siempre la razón, sino expresar nuestras opiniones y puntos de vista, sean estos correctos o no. Todos tenemos también derecho a equivocarnos.


 
Algunas estrategias para hacer más eficaces las respuestas asertivas:

Tener un buen concepto de sí mismo. Mucha gente no es asertiva porque carece de autoestima. Es importante recordarse a sí mismo que se es tan importante como los demás y tomar en serio las propias necesidades.

Planificar los mensajes. Conseguir que todos los hechos y puntos estén aclarados con antelación, confeccionando notas de referencia si la situación lo permite. Esto ahorra tiempo, produce confianza y puede disminuir la intimidación por parte de los demás.

Ser educado. Enfadarse provoca confusión en uno mismo y hace que los demás vean al individuo débil, histérico y con una baja credibilidad. Hay que recordar que se deben tomar en consideración los puntos de vista de los demás y comunicarles que se entiende su punto de vista. Negar o ser testarudo no suele funcionar a largo plazo. Es mejor guardar la calma y educada, pero firmemente, exponer la opinión propia.

Guardar las disculpas para cuando sean necesarias. No se debe pedir excusas, a menos que sea necesario hacerlo. Si se reservan las disculpas para cuando sean apropiadas, no se disminuirá ni su valor ni el propio, y los demás tomarán al individuo en serio para otros asuntos.

No arrinconar a los demás. El hecho de hacer esto habitualmente provocará cólera y resentimiento, lo cual siempre dificulta las relaciones. Si uno se quiere asegurar la cooperación de los demás, siempre se les debe proporcionar, cuando sea posible, una salida (con suerte, la salida que uno desea) y se deben esbozar las consecuencias constructivas de tal alternativa para los demás y para uno mismo.

Nunca recurrir a las amenazas. Si se responde a cualquier injusticia con fuertes amenazas, la credibilidad y la cooperación que se pretenden desaparecerán. Una afirmación tranquila de los pasos que se está dispuesto a seguir es mucho más eficaz. También si se afirma que se seguirán una serie de pasos, hay que asegurarse de hacerlo, para que así las respuestas de uno sean tomadas en serio en el futuro.

Aceptar la derrota cuando sea necesario. La aserción comporta comprensión cuando las acciones subsiguientes no son constructivas, aceptando la derrota con elegancia, en buenos términos con el otro. Los malos sentimientos saldrán más tarde. Si se le ve aceptar situaciones cortésmente tras una discusión, la gente le respetará más. A nadie le gusta ser un mal perdedor.

Ejemplos:

Ø  Usted se sienta en un restaurante a cenar. Cuando el camarero le trae lo que ha pedido, se da cuenta de que la copa está sucia, con marcas de pintura de labios de otra persona. Usted podría:

  • No decir nada y usar la copa sucia aunque a disgusto. (Conducta pasiva)
  • Armar un gran escándalo en el local y decir al camarero que nunca volverá a ir a ese establecimiento. (Conducta agresiva)
  • Llamar al camarero y pedirle que por favor le cambie la copa. (Conducta asertiva)

Este ejemplo ilustra los tres puntos principales del continuo de asertividad:

Ø  Un compañero de trabajo le da constantemente su trabajo para que Ud. Lo haga. Usted decide terminar con esta situación. Su compañero acaba de pedirle que haga algo de su trabajo. Usted le contesta:

  • Estoy bastante ocupado. Pero si no consigues hacerlo, te puedo ayudar. (Conducta pasiva)
  • Olvídalo. Casi no queda tiempo para hacerlo. Me tratas como a un esclavo. Eres un desconsiderado. (Conducta agresiva)
  • No, Pepe/Ana. No voy a hacer nada más de tu trabajo. Estoy cansado de hacer, además de mi trabajo, el tuyo. (Conducta asertiva)

Se pueden usar cualquiera de las técnicas para decir "no ", como la del disco rayado, o el banco de niebla.

Ø  Al conseguir un nuevo empleo, se desea conocer a los compañeros de trabajo, y para lograr se puede:

  • Esperar a que ellos se presenten. (Conducta pasiva)
  • Mostrar indiferencia y hacerse el duro. (Conducta agresiva)
  • Presentarse con educación y entablar una conversación con cada uno. (Conducta asertiva)

Uno cree que merece un aumento o promoción y desea pedírselo al jefe, para lograrlo se puede:

  • Exigir sin tacto, y tratar de forzar a que den el aumento. (Conducta agresiva)
  • Exponer de manera respetuosa las razones por las cuales se cree merecedor del aumento o promoción, si a la primera no se obtienen los resultados deseados, intentarlo de nuevo siempre manteniendo la calma. (Conducta asertiva)

En este último ejemplo se defienden los propios derechos (derecho a pedir ayuda y a expresar las opiniones) sin vulnerar los derechos del otro, puesto que no hay ningún tipo de orden, menosprecio o agresividad hacia la otra persona. Ser asertivo es expresar nuestros puntos de vista respetando el de los demás.

          Mujer: "Paco, ¿podrías ir a recoger a los niños al colegio?, tengo aun que preparar la lección para mañana y creo no me dará tiempo."

          Marido: "Los siento María, pero acabo de volver del trabajo y estoy muy cansado, ve tú."

          Mujer: "Sé que estás muy cansado, normal porque te esfuerzas mucho en tu trabajo. Tu jefe debería de darse cuenta de eso y no cargarte con tantas tareas. Pero te pido el favor de que recojas los niños, ya que tengo que hacer este trabajo para mañana. Luego podremos descansar."